La "viceprimera ministra" de Canadá, Chrystia Freeland, no sería más que un chiste si no fuera tan peligrosa. Es una agente devota de la FEM. Son un enemigo extranjero hostil que trabaja para destruir nuestro país, nuestra salud, nuestra constitución y nuestros derechos, al tiempo que crean una dictadura global distópica.  

La semana pasada testificó en la investigación de la Ley de Emergencias. Intentó justificar su invocación y la de Trudeau de la versión moderna de la Ley de Medidas de Guerra. La utilizaron para aplastar violentamente la manifestación de camioneros y violar los derechos de los canadienses, incluida nuestra libertad de reunión, expresión, propiedad y protesta pacífica. L brillanteiNoticias compara sus afirmaciones con la realidad. Rezamos y trabajamos por la justicia; el procesamiento de Trudeau, Freeland y otros; y el retorno del Estado de derecho y los derechos humanos a Canadá.